Una
habitación de tamaño reducido , en una esquina se encuentra sentado
Diego sollozando , en el otro extremo del cuarto se encuentra su
invitado , sentado en la silla , observando a Diego meticulosamente.
-¿Vas
a seguir así por mucho tiempo?
+¿Así
cómo?
-Pues
ya lo sabes llorando , agazapado en el rincón , rehuyendo de toda
responsabilidad.
+¡Eso
es mentira! Yo no huyo de nada , si hago todo bien y encima se me
trata tan mal...
-¡Pero
qué dices!¡No me salgas con esas! Ni tú mismo eres capaz de
creerte esas palabras , sabes que solo son escusas así que ahórrame
tiempo y párate a mirar tus acciones.
+Ya
lo he hecho , una y otra vez y el resultado es el mismo , siempre me
dejan de lado y me detestan, cuando yo no he hecho nada para ser
tratado de tal forma.
-No
si al final me habrás salido ingenuo...
+Pues
a ver señor sabelotodo explícate y déjate ya de tantos rodeos
innecesarios , que luego me culpas a mi de marear la perdiz.
-No
diré nada que no sepas ya , tan solo te recordare aquello que tanto
parece que olvidas. No eres tan perfecto , ni tan honesto , ni mucho
menos altruista si no que vienes siendo todo lo contrario , un
egoísta que tan solo quiere a la gente que le puede ser útil a su
lado , narcisista que piensa ser ya perfecto e incapaz de errar y por
tanto no debe ser corregido jamás , en definitiva una persona de la
que es normal que la gente busque apartarse. Y aún así vas de
víctima...
+¡Deja
de mentir!-Diego salta mirando encolerizado hacia la silla-.Todo lo
que dices es mentira , y fruto de tus envidias hacia mi persona.
Diego
se abalanza sobre la silla , derrumbando al ocupante y a la silla ,
se incorpora y mira el destrozo que acaba de cometer , una silla
volcada y toda la ropa que había en ella esparcida por el suelo , da
media vuelta y se derrumba de nuevo en su rincón.
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